jueves, 15 de enero de 2009

Espíritu Navideño

Llegar a Viena fue como sumergirse en el espíritu navideño. Para empezar ya desde el tren se veía la nieve caer a montones, cubriendo de blanco las colinas y los techos de las casas. La ciudad estaba toda decorada con motivos navideños. En muchas plazas o parques estaban las típicas ferias de navidad vendiendo posibles regalos a los transeúntes.
Pero más allá de la Navidad hay que decir que Viena es una ciudad hermosa. Hace algunos siglos mucha gente con dinero vivía allí y construyeron majestuosos palacios que duran hasta hoy día. Muchos personajes importantes de la cultura se desplazaban a esta ciudad, como Mozart, Beethoven o Freud. Por eso fue, y hoy sigue siendo, un punto de referencia cultural. La filarmónica de Austria o el coro de niños cantores de Viena son atracciones culturales que casi todo turista quiere ir a ver.
Caminar por la calle produce cierto estrés visual porque hay tanto para ver que uno no sabe a donde mirar. Ve un edificio majestuoso, va hasta la esquina para que le entre en la foto y desde la esquina se ven otros tres edificios impresionantes. Es difícil saber para donde caminar, a menos que uno tenga un mapa turístico que te marca donde ver qué cosas. A mi parecer lo más imponente es el Palacio Imperial de Hofburg. Este fue el palacio de los emperadores y hoy día es la residencia del presidente. Es tan grande que también alberga a un museo de una emperatriz muy famosa, muchas salas exponiendo las reliquias de lo que fue la dinastía de los Habsburgo, que incluyen las joyas de la corona y otras obras de arte que esta familia atesoro en los seis siglos que duro su gobierno. El palacio está lleno de estatuas que realmente te dejan con la boca abierta. Además hay algo bastante curioso en esta ciudad, la mayoría de las estatuas, que las hay a millares, son muy violentas. Los ángeles con espadas, los hombres con garrotes, siempre matando o golpeando a algún ser infernal, o simplemente a algún pecador. Eso fue lo único que no me gusto de la ciudad, demasiadas escenas de violencia en el arte urbano.

El último día en esta ciudad era también el último día de este viaje. Si agarro un mapa de Europa y pinto el recorrido que hice veo un extraño círculo dibujado. Reflejo de este circulo y como si el destino hiciese un loop, el viaje termino como arranco. El final fue en Viena y el principio en Berna, de ambas puedo decir que son una de las ciudades más hermosas que he pisado. El primer día de paseo fue por Venecia y el último día el tren llego muy temprano a esta ciudad, donde desayunamos mirando el gran canal. A media mañana partimos hacia la casa del hermano de Natalia, punto de partida y ahora punto final del viaje.

2 comentarios:

  1. Que preciosidad, me he quedado "bocabadada". Que bonito y bien cuidado todo. Te habrá dejado un buen sabor de boca al ser lo último y tan bonito. Como cuando te comes el último bombón y lo saboreas hasta el final.
    Nos vemos. Que tengas un feliz regreso. Un abrazo

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  2. Shopping Tips
    Al día de hoy te quedan 15 días en España, descansando de tanto trajín!!!!!!!!

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